Con motivo de la llegada de La muerte de Lucano a Montilla, colocamos a disposición de los interesados en la obra, y en la figura del poeta cordobés, estas dos publicaciones que los Amigos del Museo Garnelo editaron en el año 2010. La primera ilustra una conferencia impartida por Alberto Manuel Monterroso Peña en el Museo Garnelo, la segunda es un extracto de un texto, de Juan J. Cienfuegos, titulado A propósito de la muerte de Lucano.
Se editaron en blanco y negro para preservar la armonía de las únicas imágenes que poseíamos entonces, una antigua postal de la época y una foto del Museo del Prado. En ese momento la obra estaba en pésimas condiciones para ser reproducida.
LA MUERTE DE LUCANO. DE JOSÉ GARNELO Y ALDA
COTEXTUALIZACIÓN HISTÓRICA
El magnífico cuadro La muerte de Lucano de José Garnelo nos presenta una página completa de la historia, con una riqueza de matices pictóricos e históricos de una importancia singular. El cuadro muestra las dotes artísticas del autor, pero no sólo eso. Garnelo es el pintor más culto de su época y a través del análisis de esta pintura demostraremos también cómo conoce, con perfección de erudito, la trayectoria intelectual de los romanos cordobeses desde la época de Lucano y la relación que esta parte de nuestra Historia Antigua tiene con el mundo que a Garnelo le tocó vivir.
El autor indaga en el pensamiento de los Anneos cordobeses desde finales de la República romana hasta el siglo de oro del Imperio. Así veremos por qué la figura de Lucano y lo que éste representa sedujo a Garnelo.
A PROPÓSITO DE LA MUERTE DE LUCANO
Con objeto de ilustrar la escena que reproduce el lienzo de José Garnelo y Alda, reproducimos en estas páginas un resumen del artículo de Juan J. Cienfuegos “A propósito de La muerte de Lucano, cuadro de J. Garnelo”, publicado en Jerez de la Frontera, en la revista Trivium, N.º 10, pp. 179-191, en noviembre de 1998.
El autor destaca la singularidad del motivo elegido y su exacta referencia histórica —recuérdese que Garnelo fue considerado el pintor más erudito de su tiempo— para pasar a describir la galería de personajes que habitan el cuadro. Con gran acierto, destaca el pintor la personalidad de Pola, “la más extraordinaria de las esposas”, vinculada artísticamente con otras célebres matronas (Cornelia, Veturia, Aspasia) que Garnelo fue plasmando a lo largo de su carrera, en homenaje silencioso y emotivo a la mujer. Lucano, el poeta excelso, el favorito de las Musas, envidiado por Nerón a causa de su talento, yace en el centro de la escena, ante el dolor y la incredulidad de sus acompañantes.